jueves, 3 de septiembre de 2009

Mirada.

Hace algunas semanas caí por casualidad en la página de un medio de comunicación español. Una foto en primer plano atraía la mirada, y rodeándola, estaba escrito un artículo sobre las fiestas de España. El artículo versaba sobre las restricciones en gastos que tenían que tener en cuenta los ayuntamientos para los presupuestos de dichas fiestas, dada la crisis económica. Ni entro ni salgo en todo esto.

Pero sí en la foto.

Los ojos de la imagen que acompaña esta entrada pertenecen a la foto centro del artículo. Consistía ésta en un toro, con los cuernos en llamas, la testuz al rojo, lo que parecen unos alambres colgando de los cuernos, supongo que para sujetar el montaje que arde en su cabeza, y otras lindezas que prefiero dejar a la imaginación de cualquiera que se digne parar por un momento a pensar en qué ocurre si un toro, o cualquier ser viviente, se pasa un tiempo, horas supongo, con ese montaje ardiendo en su cabeza. Incluso teniendo en cuenta que, hoy en día, al toro se le embadurna barro en grupa y testuz, y que el montaje de fuego no se ata directamente a los cuernos, sino a cierta pequeña distancia por encima.

Qué horror.

Enseñé la foto en el lugar dónde vivo, Swaziland, Africa; Tuvieron la desgracia de cruzarse con ella desde profesores de universidad hasta gente que vive en el campo comiendo lo que cultiva, sin agua y sin luz.

Algunos comentarios fueron (mis interlocutores son varias personas):

- Qué hizo el toro para merecer semejante castigo?
- Nada, el toro no hizo nada. Ya he dicho que en mi cultura, hacemos esto para divertirnos. Es algo tradicional; igual que a vosotros os gustan vuestras tradiciones, esto forma parte de las nuestras.
- Aaaaah. Pero qué tiene de divertido el someter a un animal a ésta tortura?
- Es algo cultural, hay gente a la que le gusta y se lo pasa bien haciendo esto.
- En tu cultura se le da éste tratamiento a todos los animales? Cómo podéis disfrutar de hacer sufrir a un animal de semejante forma?
- Esteeee, no. No a todos los animales. Bueno, antes tirábamos cabras vivas desde altas torres llamadas campanarios, y jinetes a caballo intentan descabezar gansos (creo) vivos que cuelgan atados por las patas de una cuerda, y soltamos un toro por las calles que es lanceado y dardeado durante horas, etc, pero desde hace pocos años ponemos los gansos ya muertos, y la cabra ahora es un artefacto pirotécnico, …
- Nos estás contando cosas muy extrañas.
- (Con tono cabreado) Por qué traes semejante cosa (la foto) aquí?
- Hey, en vuestra ceremonia sagrada Incwala, los guerreros mas jóvenes intentan matar un toro negro dándole puñetazos en la frente.
- Es cierto. Pero eso no significa que nos guste a todos. Y debe morir rápido, no se trata de disfrutar haciéndolo sufrir.
- Están muy locos, y además la mayoría de las veces simplemente lo degüellan.
- Porqué nos has traído semejante cosa (la foto)? Qué pretendes enseñarnos?
- Nada especial, sólo otro aspecto de mi cultura y tradiciones.
- Guárdala en tu bolsillo.

Creo que la consideración y respeto que pudieran tener algunos de mis amigos por mí personalmente, y por mi cultura y tradiciones en general, han bajado bastante.

Qué lleva a alguien a defender, querer, y disfrutar estas tradiciones. Lo mas bajuno, el producir sufrimiento, atroz en este caso, libremente, sin trabas, oficial y supongo que legalmente, con el jaleo de fondo del resto,y además disfrutar de ello. Descargar las propias frustraciones, incapacidades y cobardía de esa forma extremadamente violenta, y sentir placer y orgullo por ello.

Como dijo mi buen amigo Fer, “sallop”, “personajes que describen bien la cobardía humana”. Recomiendo encarecidamente la lectura de su escrito duendes en nuestras vidas; sabe mucho de esto.

Muy aleccionador también, para leer entre líneas, y para intentar poner algo positivo en toda esta basura, Cuando lleguen las lluvias. Disfruté mucho leyéndolo, gracias Morgen.

** No pongo la foto completa porque no me apetece que esté aquí, por respeto a quién no necesita verla, y muy especialmente por un profundo respeto a mi buen amigo y su escrito.

** En alguna parte leí que quizás fuera Mahatma Gandhi quien dijo que “La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser juzgados por la forma en que sus animales son tratados”.

tomatina_260809** Prefiero dejar mi comentario sobre el escrito “dirección del mundo en manos españolas” (el confesionario) para mejor ocasión. De verdad. Sólo decir que no me gusta en manos de nadie.

La mirada, esos ojos, ya medio ciegos probablemente; el miedo, terror, pánico, rabia, ansias de sobrevivir y defenderse, lucha hasta el agotamiento, y al fin, vencido, cansancio, debilidad, locura, y abandono por el terrible sufrimiento.

Que rabia siento. Ni tan siquiera espero respuestas.

La jirafa llora.

8 comentarios:

Fer dijo...

Lavoz y la actitud es lo que cuenta, en público, cuando se restriega contr los demás el ser de cada uno.

Gracias por decirlo y hacerlo. Esto que haces ¡sí! es universidad.

Saludos, J.

Hipatia dijo...

Buenos días, amigo mío:
Gracias por no poner la foto completa, con lo poco que se aprecia en ella ya es suficiente para conmover y remover las entrañas.
Nunca podré entender ésa inclinación humana de complacerse con el sufrimiento ajeno, no solo animal sino humano. Ahí está el boxeo, por ejemplo.
Los romanos lo hacían con humanos... Algunas religiones consideran a unos seres humanos inferiores a otros; algunas ideologías, también, sólo por la raza o el color de la piel.
Los cotólicos consideran que los animales son seres inferiores de cuya vida se puede disponer a gusto sin reparar en su dignidad...
La verdad es que todo ello me espeluzna pues no lo he encontrado escrito en el lenguaje de la Naturaleza. Le doy la razón a Eudald Carbonell - y lo repito siempre-cuando afirma que "todavía no somos humanos" (tiene un libro con este título que voy leyendo lentamente, para profundizar en cada idea que comprendo).

Muchas gracias por este post.
Un abrazo desde la Enter.

sisi dijo...

Yo también te agradezco que no pusieras la foto completa...alguna vez he intentado ver alguno de los videos que Fernando me ha enviado sobre el maltrato animal,y jamás he podido terminar...ni siquiera aguanto 30 segundos.

Desgraciadamente, no queda este asunto en el mundo animal, como bien dice Hipatia, sino que entre 'humanos' ( humanos? ) seguimos una línea similar.
Los animales se defienden o matan por instinto de supervivencia, nosotros lo hacemos con consciencia, y sin piedad.

felicidades por la entrada,
besitos


Sisi

Hipatia dijo...

De vuelta en tu casa. Te he dedicado el post de hoy, no he podido evitarlo.

He traído a toda mi familia a leer tu entrada.

¿Sabes? me das mucha envidia por estar en África; soy estudiante de Historia y la asignatura que más disfruto es la de Prehistoria. De hecho, de mayor (además de buena persona) quiero ser arqueóloga. (En serio, no te rías ¿eh?)

Un abrazo grande, desde la Enterprise.

La Rata Paleolítica dijo...

Gracias por la visita Fer. Disfruta tu escapada.


Enter, impresionante título el de Carbonell. Lo pongo en la lista de libros a buscar cuando vuelva a Europa.
Y espero que como todos vieron la primera, vean tambien las fotos de la segunda, especialmente dedicada a los habitantes de la Enter. Animo con los estudios, y espero que hayas dejado de remar.
Besos.


Sisi, qué razón tienes, lo mismo que hacemos con los animales, lo hacemos entre nosotros. Otra nueva palabra traes que mete miedo: sin piedad.
Besos y disfruta de tus correrías.

isobel dijo...

uf, una que ha mamado el amor a los animales, que ha convivido con la caza, para comer y luego por afición. Los toros están muy presentes en mi zona, no soporto su maltrato y no entiendo como los mismos que se mueren por cuidarlos, luego los entreguen al sacrificio, un beso

La Rata Paleolítica dijo...

Isa, tu comentario es muy bienvenido. Me da mucho en que pensar.
Gracias por tu visita y un beso.

Anónimo dijo...

En nuestra creativa sensibilidad
hacemos de la tortura un arte,
de nuestra tradición estandarte
y aparcamos lo que nos resta de humanidad.